La pasta sin gluten es el salvavidas de quienes quieren disfrutar de este clásico sin preocuparse por el gluten. Hoy te traigo una receta sencilla, deliciosa y que te hará sentir como un chef🌟
Ingredientes: (para 2 personas que aman comer bien)
- 200 g de pasta sin gluten (puede ser de arroz, maíz o una mezcla. ¡Elige tu favorita!)
- 2 cucharadas de aceite de oliva extra virgen (el toque mágico para cualquier receta de pasta).
- 1 diente de ajo picado finamente (o dos, si eres amante del ajo como yo 🧄).
- 200 g de tomate cherry, cortados a la mitad (dulces y jugosos, como deberían ser los tomates).
- 100 ml de crema de coco o leche de almendras (da cremosidad sin recurrir a los lácteos).
- 50 g de espinacas frescas (porque un poco de verde siempre queda bien).
- Sal y pimienta al gusto.
- Queso vegano rallado o levadura nutricional (opcional, pero muy recomendable para un extra de sabor).
Preparación:
- Cocinar la pasta sin gluten:
En una olla grande, hierve agua con una pizca generosa de sal. Cuando el agua esté en plena ebullición, agrega la pasta y remueve para que no se pegue (¡sabemos cómo le gusta hacer travesuras!). Cocina según las instrucciones del paquete, pero pruébala antes de escurrirla: queremos que esté al dente, no blanda y aburrida. - Preparar la salsa:
En una sartén grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio. Añade el ajo picado y sofríelo durante 1-2 minutos, hasta que su aroma te haga pensar en una trattoria italiana. - Añadir los tomates cherry:
Agrega los tomates a la sartén y cocínalos por unos 5 minutos, revolviendo ocasionalmente, hasta que estén suaves y su jugo comience a formar una salsa ligera. - Incorporar la crema:
Reduce el fuego y vierte la crema de coco o la leche de almendras en la sartén. Mezcla bien para que todo quede homogéneo y cremoso. - El toque verde:
Añade las espinacas frescas a la mezcla y cocina hasta que se ablanden, unos 2-3 minutos. - Sal y pimienta:
Ajusta el sabor con sal y pimienta al gusto. Recuerda que aquí puedes ser creativo; una pizca de chile seco o hierbas italianas también quedarían perfectas. - Mezclar con la pasta:
Escurre la pasta cocida y agrégala directamente a la sartén con la salsa. Mezcla bien para que cada rincón de la pasta quede cubierto de esta delicia cremosa. - Servir y disfrutar:
Sirve la pasta caliente en platos hondos. Si lo deseas, espolvorea queso vegano rallado o un poco de levadura nutricional por encima.
Tips extra:
- Si te sobró pasta (¡poco probable!), guárdala en un recipiente hermético en el frigorífico. Al día siguiente estará aún más sabrosa y puedes preparar otras recetas como esta: Pasta con salsa de Tomate y Albahaca
- Agrega vegetales que te gusten como acompañantes.
- Esta receta funciona con cualquier tipo de pasta sin gluten: penne, espaguetis, fettuccine… ¡lo que tengas a mano!
¿Ves? Comer sin gluten no tiene por qué ser aburrido. Con esta receta, disfrutarás de un plato que mezcla sabor, simplicidad y salud. Ahora dime, ¿te animas a prepararla? 👩🍳🍝 ¡Déjame saber cómo te fue en los comentarios!